Los vehículos eléctricos están ganando, poco a poco, un hueco en la vida de muchas personas. Ya sea por la comodidad o por el compromiso ecológico, cada vez es más común ver este tipo de medios de transporte. En esta ocasión vamos a hablar de las bicicletas eléctricas.
Seas de bici tradicional o hayas optado por una eléctrica, ambos transportes son una buena forma de concienciar y comprometerse con el medioambiente. Para los desplazamientos de largas distancias, las bicicletas eléctricas suelen ser la opción más cómoda. Si estás pensando en hacerte con una, seguramente tengas dudas sobre la duración de la batería o el mantenimiento de la misma.
La capacidad de la batería va relacionada con el modelo y la marca que se adquiera; cuánta más energía almacene, más tiempo durará. Por ende, cuánta más energía tenga la batería, más kilómetros podrá recorrer. Se estipula que en tramos urbanos las baterías de mayor uso alcanzan los 80 kilómetros. Mientras que en tramos de carretera y campo, debido a que normalmente se necesita más potencia, la distancia se acorta.
Lo más habitual es que ronden los 4 años de vida útil, aunque hay compañías que garantizan que las suyas aguantan más. Como el desgaste de la batería es una causa muy común, la mayoría de los fabricantes ofrecen garantía.
Consejos para el mantenimiento de la batería
Si estás pensando en adquirir una bicicleta eléctrica, o ya cuentas con una, aquí te dejamos algunos consejos que tener en cuenta a la hora del mantenimiento.
- Emplear siempre el cargador recomendado. Es muy importante seguir las consejos del fabricante y utilizar siempre que se pueda el cargador original. En caso de no disponer del mismo, conseguir uno de la misma marca. Si utilizamos uno no recomendado, podemos acabar dañando y quitándole ciclos a la batería.
- Evitar que se descargue en su total. Habrá situaciones en las que no se podrá evitar la descarga total, pero es recomendable no bajar habitualmente del 30%. De esta forma evitaremos que la batería se corrompa.
- Evitar la exposición a temperaturas extremas. Ni mucho calor ni períodos de frío extremo; ambas situaciones pueden acabar afectando a la duración de la batería. Intenta protegerla correctamente cuando esté aparcada, para no recibir el impacto del clima directamente.
- Usarla al menos una vez a la semana. Así como usar demasiado un objeto hace que se acabe gastando, el poco uso del mismo provoca también un desgaste. Seas de usar tu bici a diario o esporádicamente, lo importante es usarla.
- Realiza un ciclo de carga y descarga completo. Cada mes o cada dos, es recomendable emplear un ciclo íntegro: descargarlo y cargarlo en su totalidad. De esta manera la batería se mantendrá calibrada y evitaremos que se corrompa.
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